Por José Miguel Rodríguez Dorantes
El otro día conversando con un entrañable amigo surgió el tema de los mexicanos (cientos de miles de nosotros) que somos residentes en el extranjero. Reflexionando sobre el tema caíamos en la cuenta, de que, sin lugar a dudas habría multitud de comunidades esparcidas a todo lo largo y ancho de los cinco continentes.
Sin embargo, nada se sabe de ellas. No son visibles. Pareciera que no existen.
Fundamentalmente, para la opinión pública en México, los mexicanos residentes en el exterior se concentran en los Estados Unidos (por diversas razones de tipo económico, político, histórico, etc.). ¿Quién no tiene un amigo, un primo o cualquier otro pariente en este país?, la respuesta es: casi todos.
De tal manera que, toda la información que se genera al respecto tiene como punto de mira esta región olvidando que en el resto del mundo también hay mexicanos.
Evidentemente reconozco que, por historia, por cercanía y por número, nuestros compatriotas en el vecino país del Norte son mayoría (millones de ellos), hacen que se resalte su influencia y condiciones de vida (además del aporte económico que su actividad genera y que envían a México a modo de remesas), y por tanto, sean visibles.
No obstante, es mi intención evidenciar la existencia de otros mexicanos que han partido hacia el exterior y que, se encuentran residiendo en otros países del orbe. Como uno de esos mexicanos en el exterior, en el caso concreto de España, me gustaría seguir sintiéndome parte de esa gran nación que es México, contribuyendo y colaborando en su desarrollo, a través de la participación y quehacer conjunto con otros compatriotas como parte de la sociedad civil que somos. Contrariamente (no sólo es mi percepción personal), no sentirme aislado, olvidado, no tomado en cuenta. Razón por la cual hago un llamamiento a otros mexicanos miembros activos de la sociedad civil (asociaciones, plataformas, grupos de reflexión, etc.) a crear un espacio de diálogo y debate sobre esta situación con el objetivo de generar propuestas que podamos compartir y hacer llegar a los órganos competentes.
A nuestras autoridades, principalmente, a que éstas miren hacia otras latitudes y geografías, y vean que ahí también ondean banderas mexicanas representadas por cada uno de nosotros que, aunque lejos de nuestra tierra nos sentimos parte de ella.
Ojala estas líneas sean un “granito de arena” que genere el interés y la motivación a que, los colectivos de mexicanos residentes en el exterior de España, Europa y de otros continentes nos acerquemos, conozcamos y trabajemos (para alcanzar este propósito de vinculación y acercamiento directo con nuestro país) todos juntos como lo que somos, un pueblo unido, solidario y tenaz.
Para cualquier comentario, idea o propuesta dirigirse a este correo: hermestri3@yahoo.es
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